Ingredientes:
- 1 manojo de acelgas frescas
- 3 dientes de ajo
- 1 cucharadita de pimentón dulce
- Aceite de oliva extra virgen
- Sal al gusto
Paso a paso:
1. Comienza por lavar bien las acelgas bajo el chorro de agua fría. Asegúrate de eliminar cualquier suciedad o impureza que puedan tener. Una vez lavadas, corta las acelgas en trozos de tamaño similar.
2. Pelar y picar los dientes de ajo en trozos pequeños. Puedes ajustar la cantidad de ajo según tu preferencia de sabor.
3. En una sartén grande, calienta un poco de aceite de oliva a fuego medio. Añade los trozos de ajo picados y deja que se doren ligeramente.
4. Una vez que el ajo esté dorado, añade el pimentón dulce a la sartén y remueve bien para que todos los ingredientes se mezclen.
5. A continuación, agrega las acelgas a la sartén y mezcla todo junto. Asegúrate de que todas las hojas estén cubiertas con el aceite y el ajo.
6. Cocina las acelgas a fuego medio-bajo durante aproximadamente 10 minutos, o hasta que estén tiernas. Remueve ocasionalmente para evitar que se peguen o se quemen.
7. Una vez que las acelgas estén cocidas, sazona con sal al gusto y remueve nuevamente para asegurarte de que estén bien condimentadas.
8. Sirve las acelgas rehogadas con ajo y pimentón como guarnición o como plato principal. Puedes acompañarlas con arroz blanco, patatas o incluso añadirlas a un revuelto de huevos.
¿Puedo utilizar acelgas congeladas en lugar de frescas?
Sí, puedes utilizar acelgas congeladas si no tienes acceso a las frescas. Sin embargo, ten en cuenta que las acelgas frescas tienen un sabor y textura mucho más pronunciados.
¿Puedo sustituir el pimentón dulce por otro tipo de especia?
Si no tienes pimentón dulce, puedes utilizar pimentón ahumado o incluso un poco de chile en polvo para añadir un toque de picante a la receta.
¿Se pueden guardar las acelgas rehogadas en la nevera?
Sí, puedes guardar las acelgas rehogadas en un recipiente hermético en la nevera por hasta 3 días. Sin embargo, ten en cuenta que su sabor y textura pueden verse afectados después de ser refrigeradas.
¿Se pueden congelar las acelgas rehogadas?
Sí, puedes congelar las acelgas rehogadas una vez que se hayan enfriado por completo. Asegúrate de almacenarlas en un recipiente hermético o en bolsas de congelación para mantener su frescura.
Espero que disfrutes de esta deliciosa receta de acelgas rehogadas con ajo y pimentón. ¡Disfrútala y no dudes en compartir tus comentarios y sugerencias!