Ingredientes:
- 250 gramos de pasta corta (penne, fusilli, etc.)
- 200 gramos de tomates secos
- 2 dientes de ajo
- 1 cebolla pequeña
- Aceite de oliva virgen extra
- Parmesano rallado
- Sal y pimienta al gusto
- Perejil fresco picado para decorar
Paso a paso:
Paso 1: Preparar los tomates secos
Comienza remojando los tomates secos en agua caliente durante aproximadamente 20 minutos. Luego, escúrrelos y córtalos en trozos pequeños. Reserva.
Paso 2: Cocinar la pasta
En una olla grande, hierve agua con sal y cocina la pasta según las instrucciones del paquete hasta que esté al dente. Una vez cocida, escúrrela y reserva.
Paso 3: Preparar la salsa
En una sartén grande, calienta un poco de aceite de oliva y agrega los ajos picados y la cebolla finamente picada. Sofríe a fuego medio hasta que estén dorados y fragantes.
Añade los tomates secos cortados y cocínalos durante unos minutos para que se ablanden y liberan su sabor. Puedes agregar un poco de agua de remojo de los tomates si la salsa parece estar muy seca.
Sazona con sal y pimienta al gusto y mezcla bien.
Paso 4: Combinar la pasta y la salsa
Agrega la pasta cocida a la sartén con la salsa de tomates secos y mezcla bien para que todos los ingredientes se integren. Cocina durante unos minutos a fuego medio-bajo, revolviendo de vez en cuando.
Paso 5: Servir y decorar
Una vez que la pasta esté lista, sirve en platos individuales y espolvorea con parmesano rallado y perejil fresco picado para darle un toque de frescura adicional. ¡Listo para disfrutar!
¿Puedo usar otro tipo de pasta?
Sí, puedes utilizar cualquier tipo de pasta que prefieras. La receta funciona muy bien con pasta corta como penne o fusilli, pero también puedes probar con pasta larga como spaghetti o linguine.
¿Puedo agregar algún ingrediente adicional?
¡Por supuesto! Esta receta es muy versátil y puedes agregar ingredientes adicionales según tus gustos. Algunas opciones podrían ser aceitunas negras, alcaparras o incluso un poco de pancetta o jamón picado para darle un toque salado.
¿Puedo usar tomates frescos en lugar de tomates secos?
La receta original utiliza tomates secos, ya que su sabor intenso y su textura suave complementan muy bien la pasta. Sin embargo, si no tienes tomates secos a mano, puedes sustituirlos por tomates frescos cortados en cubos pequeños y cocinarlos junto con la salsa de ajo y cebolla.
¿Cuánto tiempo se pueden almacenar los restos de esta receta?
Si te sobra pasta, puedes guardar los restos en un recipiente hermético en el refrigerador durante 2-3 días. Simplemente caliéntala en el microondas o en una sartén con un poco de aceite de oliva antes de servirla nuevamente.
¿Puedo congelar la pasta con tomates secos?
La pasta con tomates secos se congela bien. Solo asegúrate de guardarla en recipientes herméticos o bolsas aptas para congelador y consumirla dentro de 1-2 meses. Descongela en el refrigerador y recalienta antes de servir.